Maletín de lujo 2010

Los días de trabajo cada vez se hacen más cortos. Por lo menos para mí. No porque tenga menos cosas para hacer, sino porque he trabajado toda mi vida para darle a mi vida esta posibilidad. No necesito encerrarme 10 horas como cuando era un trabajador. Ahora con todo el lujo que me rodea, me doy el lujo , valga la redundancia, de hacer deportes, viajes, vivir la buena vida. Para ello he trabajado. ¿Tiene eso algo de malo?

También he pensado en el futuro de mis hijos, y como a ellos no les gusta trabajar porque tienen un padre rico, entonces me he encargado de dejarle algunas deudas de impuestos impagos para que tengan que saldar cuando yo ya no esté. No tendrán otra salida que ir a trabajar y entender que la buena vida se gana. Algunos creen que mi táctica de enseñanza es un poco dura, pero la verdad es que ya no sé qué hacer para que mis hijos despierten de la nebulosa tecnológica en la que se encuentran.

Solo quieren divertirse y vivir la vida del papá. No pueden entender que trabajé día y noche durante 40 años de mi vida para poder darme estos lujos y ellos piensan que tan solo con soñarlo uno puede tenerlo todo. Los sueños son importantes al igual que las metas pero sin trabajo nada se hace realidad.

Mi hijo mayor tiene 32 y todavía no sabe qué quiere hacer de su vida. Entonces como le gustan tanto los autos, le he comprado el maletín más caro del mundo, deportivo, hermoso, naranja y de última tecnología para que salga a buscar trabajo y apostar a que va a tener suerte en la búsqueda. Me ha costado $15.000 dólares y ¿Saben qué me ha dicho cuando le dije que me costó eso? Simplemente: «Papá… con esa plata me compraba la PS3«. ¿Qué tengo que hacer? ¿Alguien me puede dar un consejo? Dejen sus comentarios.

Vía | bornrich

Originally posted 2010-02-28 21:37:29.

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