

¿Y si te decimos que con lo que vale una botella de vino del considerado como más caro del mundo podrías comprarte una casa, y además sin hipoteca? Podrías, por ejemplo, comprarte una casa en el Bronx (en pleno Nueva York), o en el centro de Madrid.
Y, si es así, ¿cuánto dinero gastarías en una botella de vino? Es probable que, si te encuentras entre la gran mayoría de personas, posiblemente no te gastes más de una cantidad no superior a los dos dígitos. Incluso puede ser que avances lentamente hasta los tres dígitos, pero siempre no superando mucho esta cantidad.
Lo cierto es que solo unos pocos elegidos pueden tener un presupuesto tan elevado a la hora de comprar vino. Una botella de vino cuyo precio, para el resto de los mortales, podría suponer lo que costaría su vivienda (incluyendo hipoteca y sus intereses).
1. Screaming Eagle Cabernet 1992 (500.000 dólares – 448.530 euros)
Se trataría del vino tinto más caro vendido hasta el momento. Consiste en una botella de seis litros que, por el año de elaboración, es sorprendentemente joven. Y se trata de un Cabernet proveniente de Napa Valley, una región prestigiosa en la elaboración del vino.
La marca es también famosa por su «Napa Cab», una gama de vinos con aromas de roble envejecido con regaliz, grosellas negras, moras, vainilla y chocolate negro ahumado.
2. Château Cheval Blanc 1947 (304.375 dólares – 273.042 euros)
Se trata del segundo en la lista de botellas de vino más caras jamás vendidas. Consiste en un Saint-‘Emilion de tamaño imperial (lo que equivale a 6 litros) de Cheval Blanc de 1947.
Y a pesar de ser una cosecha que casi pasó desapercibida, muchos expertos lo han llegado a considerar como el mejor vino del siglo. Fue comprado en una subasta de Christie’s en Ginebra por un coleccionista privado en el año 2010.
3. Château Lafite 1869 (230.000 dólares – 206.323 euros)
En el momento en el que se empezó a vender esta maravillosa botella de 1869 se estimaba que alcanzaría los 8.000 dólares. Sin embargo, se vendió por más de 233.972 dólares. En aquel momento fue considerada la botella de vino más cara del mundo, aunque poco tiempo después la botella de Château Cheval Blanc consiguió hacerse con dicho puesto.
En total se vendieron cerca de 2.000 botellas directamente desde las bodegas de Lafite. Y desde el primer lote de 2009 hasta llegar a la aclamada botella de 1869, los precios a veces llegaron a alcanzar tres veces la tasa del mercado estadounidense.
¿Quién la adquirió? Al parecer se trató de un coleccionista privado asiático, total y completamente anónimo. Sea como fuere, lo cierto es que en Asia las botellas de Lafite son consideradas como una auténtica compra de lujo, y un artículo de regalo verdaderamente codiciado, donde de hecho los precios son astronómicos.
Lo cierto es que gustó mucho al público asiático, ya que la cosecha de 1869 fue en realidad, según dicen los expertos, bastante rara, con notas de muy buen sabor.
4. Château Margaux 1787 (225.000 dólares – 201.838 euros)
Se dice que nos encontramos ante el «vino más caro jamás vendido». Y es que se trata, en realidad, de una botella sumamente famosa que técnicamente nunca fue vendida.
Cuenta la historia que, durante una cena de Margaux en el Hotel Four Season, un camarero derribó la botella y lo desperdició.
El propietario de la citada botella, un comerciante de vinos de Nueva York conocido como William Sokolin, la había asegurado en el año 1989. Él la valoró en 500.000 dólares, aunque las aseguradoras «solo» la estimaron 225.000 dólares (de hecho, fue la cantidad que terminaron pagando por la citada botella).
Fue una de las famosas botellas de Thomas Jefferson, que se firmaron con las iniciales Th.J, pero nunca fueron autenticadas como parte de la colección personal del tercer presidente de los Estados Unidos de América, que ocupó el cargo entre 1801 y 1809.
Y de regalo: Heidsieck 1907 (275.000 dólares – 246.691 euros)
La historia de esta bebida es sumamente curiosa. Y no se trata de una botella de vino en sí misma, sino de una botella de champán. No obstante, hemos querido incluirla en este listado por su elevado precio.
En el año 1998, unos investigadores encontraron alrededor de 2000 botellas de champán de la marca Heidsieck, elaboradas en el año 1907, a bordo de un barco sueco que durante la Primera Guerra Mundial fue hundido por un submarino alemán en las costas de Finlandia.
Las botellas de champán estaban destinadas a la Corte Imperial del Zar Nicolás II de Rusia, pero nunca llegó a su destino.
Originally posted 2019-08-05 09:51:19.